Amé en aquella mirada lo que había de sospecha. Y el miedo de las cosas tenía en aquel espejo la ilusión de disentir del futuro. Contacto: jrubaz@hotmail.com
Los cuatro puntos cardinales son tres: el Norte y el Sur.
No las palmas, no el ánimo, no al lucro, no a la veda, no a la deslealtad y a la traición.
Equivalencia.
Encriptamos la realidad para dar pie a la falacia y paso al egoísmo.
Arrogancia y pusilanimidad.
Dos caminos. Uno sigue recto en círculos de espiralesbucles y otro ataja donde se saja la humanidad dando rienda suelta a la atadura del fin justifica los medios.
Desidia.
Potagonista: Vómito principal entre bambalinas.
Escrúpulos.
Síntomas inequívocos donde la dignidad, la decencia y la honestidad se desangran por un puñado de piedras manchadas de leche sanguinolenta o de sangre lechosa. Al gusto.
Ditirambos.
Coro promiscuo donde el ciclo circadiano ansía fuste como diezmo y media hora de cortesía.
Necesidad.
Corta edad que durante los años pierde la noción del aire y el espacio.
Conticinio.
Conexión hasta el alba para alejar fantasmas y creerse el cuento de abolengo.
La ley del espejo.
Estrías y cicatrices maquilladas y retocadas para deleite de lo que se quiere entregar sin ser visto. Pomada espiritual que no quiere ver a la evidencia, camufla las trampas y acuchilla la promesa.
Calendario.
Hoja de fumar.
Boquilla.
Verborrea.
En la salud y en la enfermedad, en la alegrías y en las penas....
...en la ausencia del silencio se aleja la humildad.
La pena gorda con mucha árnica es saludable para la conciencia.
Como dicen los lugareños de la profundidad:
A rey muerto, rey puesto.
Como dice una una vieja canción:
No estoy "patí".
Y como los confesionarios sólo existen en la cárcel de nuestra mente y en la jaula de nuestro interior:
Cuando caes al fondo del vacío, sólo se escuchan los cantos de sirena y el tintineo de las monedas de Judas.
Cuando, hoy, a un niño le pones ante una lámina en blanco y unos lapices de colores, lo castigas.
El océano virtual es un charco de barquitos de papel, un manojo de paraguayos deshuesados. De Casablanca a Damasco crece la miopía. Me ahorraré el acuse de recibo, no hay peces ni jaula. Sólo pájaros huérfanos. No migran, anidan bajo tierra. No hay barrotes, bastardos del barro.
La genta que va por la calle mira al suelo, no miran ni al cielo, ni a los tejados, ni a los tendederos. Sombreros de nubes y muletas gemelas. Las palabras en las antenas y tronchadas, cualquier letra callejea.
Eres peculiar, porque la gente de este mundo, ahí fuera es normal;
aquí dentro el mundo deja de ser peculiar y se convierte en el universo.
Todo gira en constante desincronización.
Te confiaré que mi conciencia es sumamente arisca, me reprende cada vez que la tentación se abre paso.
Nunca sobran los motivos, sólo las palabras que por inventar jamás nacerán.
Alguien me llamó come(lame)cocos, y le mordí el alma mientras le acariciaba
la excusa perfecta; una excusa no deja de ser una psicóloga con bata
invisible y notas a la carta y un apego un sentimiento cojo, un ciego codicioso.
Llevaba tres meses a la caza y ruptura de la escoba más embrujadamente perversa.
Dulce como la sal, agria como la piel que chorrea la miel, ácida como el
error de traer hijos al mundo mientras lo más maravilloso que es
contemplarlos, sufrirlos, amarlos y criarlos se convierte en el faro de
Priamo. Essencias y eva-siones evocadoramente reales.... como la salada herida que en las muñecas la atadura marca, y el placebo queratina.
Fija y concibe. Dilata y desvirga. Un buey manso, cheposo y cochambroso
como es mi deslome ha presenciado posiblemente una de la danzas más
bellas que una sombra puede ejercer sobre el vientre de la lujuria.....y
el baile manso, cariñosamente afilado, desproporcionadamente terso
nubló al día en noche de cuervos, de brujas y merlines desenmascarados.
El arte del sexo cobra sentido cuando el guión desquicia, atolondra y
fulmina las reglas...que no las normas.El arte del amor paga sentido cuando la espontaneidad espanta a las olas... rompeolas.
Su hueso es un trozo de cielo.....en vida. Un auténtico paseo allá donde
el calvario se convierte en el infierno más endemoniadamente dulce,
armónico y rozado. Donde la última letra no existe, y las palabras se
transforman en el gozo de sentir como el deseo bulle, hierve que la
materia gris que recorre desde la coronilla, atraviesa entre las cejas y
se desliza por el olfato.... mesa los cabellos de los labios y abriendo
la nuez se clava en el omóplato y sangra los pezones del macho cabrío
troceada y convenientemente servido como el cordero degollado..... la
naúsea melosa se enfrenta al trasiego y como una ruleta puntea, sortea,
azuza que el blanconegro no son matices sino las maravillosas
sensaciones que nunca creiste que encontrarías alquilando un trozo de
isla furtiva. La sangre licuada, condensada, a punto de
caramelo...revienta y transgrede las leyes del más putanesco de los
escenarios.... todo lo anteriormente vivido, era un sueño....una utopía
en estado catatónico.
Parece mentira, pero su hilo descosió a la bestia....y su laberinto
mental me perdió en la selva de cien mujeres ataviadas en peplos de
masculinas formas y dildos fantasmagóricos.
Su verga intelectual....me sumió allí donde Morfeo, encabritado se
despoja del tiempo y te pierde en los océanos de la nada más radiante.
Altera el pulso y te sume en la metastasis que el pecado descarna en
obra magna. El afrutado.....aroma de su ingle amazónica te turba en la
zona cero. El hielo, la purga, la saliva se agotan en ese entuerto por
descubrir como una mente con ese cuerpo no levita donde las estrellas se
quitan el sombrero.
Y su hueso, sus huesos, te lleva, te llevan a donde quieras llegar in corpore.
Es áquel hojaldre, que no desconfia de los remilgos, ni de los
halagos.... es aquella mistela vírgen que cada vez que tocan sus puntos
estratégicos se abre a los nuevos gozos, a las nuevas luces.... al azul,
inexorablemente se acaba arrodillando.
Es la piedad del camino. Te sientas en el cuenco de sus muslos y las
sensaciones se reinventan en la embestida melosa, en la embestida
cabrona.
Como su alma no reniega a
la apertura Gambito de Dama reclinado....; como tres años.... serán un fin de siglo, o una noche en las fantasías del Firebird..
los guiños de una Ícara danza donde el tapete es leche y el vaso, sábanas
de porcelana.
Pero lo que más me arrebata es la cúspide que su cerebrito, su
fortaleza, su sabiduría anodadó a mi indulgencia...a mis párvulos
pasos.... me fascinó lo culta que es la belleza cuando se desnuda por la
testa.
Me emparanoié cuando descubrí que el mundo no deja de ser un pañuelo de pucheros, tendidos y rotos al pairo....y al palo, al maldito palo
ciego....una buena tarde de invierno el azul le desnudó el nombre, al
placer de lugar y al deseo de castillos de aires quietos, muertos de
vida....paralizados por como la belleza, roza la tan soñada armonía. Vida intranquila.
Que la diestra, se lamenta.
Son las cosas del querer, las arrugas de cualquier voz....
Si te abrazo desnuda, es que me sentí tan a gusto, tan bien que una parte de mi ser se viste con tu presencia.
Y desnuda, ahora, nunca... estás. Ni eres. Vinagre.
Si nos giramos, volveremos a encontrarnos allí donde los sueños nos busquen, que encontrar nunca sabes cuando volverá a suceder.
Los grillos y las muñecas, una buena forma de anochecer la realidad.. al mondar las mandarinas, los gajos atrapan sueños.
Pido piedad para todas esas MADRES y en especial la mía, que han decido dejar de hablar y con ello distanciarse emocionalmente... de sus hijos.
Pido piedad por los vacíos que pueden sentir en un día como hoy.
Pido piedad por perderse lo que sus HIJOS pueden aportar a sus vidas.
Pido piedad por no poder disfrutar de la maternidad.
Pido piedad por la soledad en su corazón que les puede acompañar en el arduo proceso de vejez.
Pido piedad por la frustración que les ha llevado a no aceptar a sus hijos tal y como son.
Pido piedad por no poder aprender de los errores.
Pido piedad por no perdonar al fruto de sus acciones y lo que un día fue su ilusión.
Pido piedad por aquellas que repiten los patrones de sus progenitores.
Pido piedad por ellas y le pido al universo que les ILUMINE EL CAMINO allí donde estén.
A su vez...
Las felicito por las grandes lecciones que nos han venido a enseñar.
Las felicito por las grandes personas que nos están llegando a hacer.
Las felicito por las virtudes que han provocado en nosotros.
Las felicito por enseñarnos que la vida sigue llena de vida.
Las felicito por habernos dado la VIDA.
Y para todas esas madres luchadoras, respetuosas, tolerantes, responsables, cariñosas, dedicadas...
que han hecho personas tan bellas como las que me rodean en este mundo, les doy las gracias por su dedicación, quizá sin ellas no tendría personas tan formidables en mi vida.
Así que hoy felicito a TODAS las madres del mundo, entre ellas la MÍA. Ya sea por su gran dedicación como por su gran LECCIÓN. Pues gracias a vosotras somos quienes somos.
-Ya sabes. Escribo cuando se me comen las lágrimas, la puta pena o los dichosos nervios. O la angustia, esa preocupante y glotona cocinera.
-¿Entonces?
-Nada que decir.
-Pues ni lo pienses, ni lo escribas, ni te lo digas.
-¿Callo?
-Por supuesto, errático.
-Cogeré la bicicleta.
-Cógela.
-Ella sin tus pies no es nadie. Y tú, sin ella no eres nada. -... -Tiene arte que la mayor de las pequeñas sea aquella que acabe donde sólo empieza la única. -¿La rueda...? -No, el guisantepiedra. -Entonces es él. -No, es ella. La codicia.