Amé en aquella mirada lo que había de sospecha. Y el miedo de las cosas tenía en aquel espejo la ilusión de disentir del futuro. Contacto: jrubaz@hotmail.com
Los cuatro puntos cardinales son tres: el Norte y el Sur.
sábado, 16 de noviembre de 2013
martes, 1 de octubre de 2013
Erratic diary II
![]() |
Marcin Sacha |
100
Noche de gatos perros y gatas perras.
De riguroso y lacrado cuero. Maullándose los ladridos, mientras los tobillos juegan en el corral.
Y así, mientras el hummus fermenta, se lamen los lunares los truenos a sol antico.
Mientras, el vástago cena a la derecha del collar, la madresueñaselva se desprende de gasas y jarras límpidas.
Gustas.
Gustas y te relames.
Y en la cleopatra mirada de puerca encelada, la sutileza del cutis se deja el malva y las agallas.
Ladras.
Nunca dejas de ladrarme.
El gato entre la carótida y el violín.
Jambre.
Nunca dejamos de abraperrearnos.
96
Pezoneras y la vergada de nalgas fustigó al liláceo ossobuco que se trincha con los nudillos en círculos y en pausa.
Repeat all.
Pezoneras.
Dormían bajo la piel rosa de la hiedra.
Y despertaron.
Primero un verano non. Luego un invierno al punto.
Y turgentes, relucientes, eléctricos se disputaban el honor de ser más sensibles, vehementes, puercos y cortesanos.
Siempre se vanaglorió el izquierdo de ser más diestro.
Aunque el derecho por henchido y retozón daba más al tallo. Que no la talla.
Las debilidades son incoherentes.
Adoramos al gas noble.
Aunque esa pezonera, carne magra y húmeda donde las haya, se ensalsa, se turba al sólo roce del recuerdo del sabo. Y es que el sabo es pegajoso, visceral, sediento.... y la saliva dama, coqueta y agridulce.
El esputo lo aclaró.
Ponte bocabajo, de espaldas y espútame donde la pezonera alisa pliegues y hace la raya a la seda rebelde.
Puedes tocarte.
Tocarte y comprobar si tus labios se muerden por la saliva puritana o por el cerdo sabo. Al mador o al sudor, poco les importa.
Siempre prefieres chuparte el pulgar.
Querencia... por esa hermosa pezonera.
95
Nada es perfecto.
Nadie es imperfecto.
Sólo el trance.
Perfecto, por el encaje, la sinergia, la simplicidad y la generosidad. No espera, ni desespera.
Por su pureza.
Imperfecto, por la gula, el anhelo, el eco y lo cóncavo. Por su trono.
Nada es eterno.
Nadie es olvido.
Sólo el trance.
Eterno, por que no mide el tiempo, ni mengüa al espacio; no peina muñecas ni desnuda nucas.
No viste santos, ni desahoga la leche en la sange, para deliquio del ego.
Olvido, por que parece que no existe. Pero es y está. Por que parece que no arriba, y aprende,
siembra. Como el tacto de la piel de melocotón en los huesos del alma.
Nada es mentira.
Nadie es verdad.
Sólo el trance.
Mentira, por que nace cada noche, y muere en la duermevela del conticinio de tus ojos arco iris.
Verdad, por que crees que la mentira reconoce lo que las palabras por inventar acallan en su
verdad.
Nada es dolor.
Nadie es amor.
Sólo el trance.
Dolor, por que el amor no es de nadie y está en todo, en todos.
Amor, por que el dolor es de todos y no tiene padre. Por que su angustia es la madre del amor.
Nada es de nadie.
Nadie es de nada.
Sólo el trance.
De nada, por que nadie está sin ser.
De nadie, por que la posesión es nada.
Nada es orgamo.
Nadie es místico.
Sólo el trance.
Orgasmo, por que hasta que no se entienda y sienta la mitad de la mitad de la mitad... con tan pocas
palabras, como con tantos gestos, todos; el placer no se convertirá en el pájaro errante que anida
en el corazón de tus labiox, en la rama de tu lengua.
Místico, por que dos es uno, y uno en dos.
Sólo el trance de tus ojos en la mirada del porvenir forja el camino de la vida tranquilla.
Sólo y desde aquella primera vez sentí que se puede, y se debe, crecer para que el amor sea
un místico orgasmo cotidiano. Nocturno.
Desde el primer uno, dieciséis doses.
Sólo alcancé la paz, cuando el perfume de tus pestañas rizadas desencadenó lo que dormía
hacia demasiado tiempo en el cofre oxidado de los miedos.
Ahora reluce.
sábado, 28 de septiembre de 2013
Erratic diary I
111
La diagonal perfecta se convierte en un globo sonda. Del "suma" y sigue, el Hilton pide la hora para cenar en Trevi. Los zapatos en el banco. Mustela en los párpados. Y el rictus desangelado. Es una época madura. Casi mística. Se adivinan pocas piedras y todo guijarros. Ninguna miga y el mantel liso, aterciopelado, oval.
Las manos a la vera, entre el aire y el espacio.
Necesario.
104
Chesterfield le susurra a Winston: "Fúmate la agonía. Bébete la lucha. Desarma a la impaciencia. Hilvana sábanas de mariposas."
Winston, asiente sin trajinar palabra.
Chester, desboca un papelillo y ciñe la vitola. Se sienta sobre el paquete enguruñado. Y pellizca el pitón de la boquilla.
Winston, se mira los pezones.
Chester, sonríe.
Entre ellos hay cuatro palmos de aire y un olor indecible.
Winston, ayurvédicamente uncido se frota las cicatrices mientras rompe con la mirada los ceros a la izquierda que Chester bocanea.
Luz cálida.
Dos ambientes.
Ni una sola palabra. "Paque"...
Y en esa errática situación.
Los dos toman el plástico que da sustento al orden. Al desfiladero del desgüace.
Winston toma su codo, se rasca y huyendo de miradas sostenidas, sucumbe.
Chester sorprendido alza la ceja y le guiña un clic de mechero.
El cenicero arde. Y el humo les dispersa.
"1.30 Tot ok".
Ayu, se "descongoja".
103
Kosta Boda no vive en el fulgor, ni es intocable.
Si se cae, se rompe.
Si se roza, enmudece.
Si se lesa, sangra.
Si se recrudece, el monstruo del frío hielo derrite sus alas de vidrio, y frágil, tan frágil que un suspiro las arropa hasta 1742.
Kosta Boda no mora en Chuchelandia.
Las zarzas, el camino, el cortafuegos, el charco y las llaves maestras están dentro.
Y mientras se relamen las ganas, el plato sucio hace juego con los vasos.
Knarra oscurece y Norman dió con la clave:
Difumina. Difumina. Difumina.
A contraluz.
jueves, 4 de julio de 2013
lunes, 17 de junio de 2013
A la Ícara sombra que se enterró
![]() |
Fotografía: Vlad Khodsky |
Rescatando del dos mil nueve un farol sin reflujo, el faro de hoy me saca la sonrisa de cuajo. Qué hermosa es la perspectiva cuando de la lucha nace la eterna paz. Cuando desde la quietud las amapolas de Kierkegaard se enraizan a la veleta de Voltaire.
El quebrantahuesos del oropel, es ahora un templo en Siria.
"Y para que conste en acta, cómprate una rodilleras, un babero y trombocid.
Dedicado al Ícaro que adquirió en las rebabas un metro cuadrado de círculos angulosos, juego al snooker sobre un tapete ondulado, mientras la montaña rusa se fuma la vitola de su inconsciencia.
Después de tres semanas de un chavo sin rupias, y de dos con un billete de dos euros a medias con el destino... insisto, siempre insisto.
Me he divorciado del claroscuro. Me han divorciado, vaya, estaba durmiendo mientras la oscuridad me enculaba a traición. Es una sintonía con el mal del norte. Donde las ángulas desovan liendres y las heces, veces.
En fin....el sur, escuece.
....Ando xylumeado, en estado catatónico.... tres días al pleno sol, zasca...... te conserva y enlata el par de neuronas que quedan libres, si algo queda ya libre a la brújularota del sosiego.
HuidobroL "Señora hay muchos pájaros en su piano."
Ando promiscuo, cerdo piara; coleteo rítmicamente como los dildos de pilas a manivelas. Salto niño, béndita la mueca. Vuelo raso, que las alturas me dejan calvo de consortes y huérfano de padres, las nubes. Claro.
Y oscuro....ando ahogando al cielito lindo, al camelo de serrín, al infausto cabrón que inventó los calendarios de siete noches. Al infinito remilgado, al lameteo arisco, al jabón que pica, a la ardilla que se las pela, al que se la casca con papel de fumar y al que se le encoge con celofán, o sea una torrija de agua pura, de putas aguas seglares....donde el nudismo anida con aftersun en lo más noble que todo hombre cuelga.... el corazón (Coraza endémica que se acrecenta a lo largo de las visitas al diván de doña cordura).
Son síntomas de lo descerebrado que cojea el mundo. Ahá, ese pañuelo de seda agusanado, con puntas romas y cielo redentor, que te parte el culo de la risa y las nalgas del dolor.
El entresijo es hábil.
Las comas, deshonestas.
El punto y final, febril. Cuarenta grados a la sombra, que el noventa y seis te duermee, y los dieciocho son vómitos a destajo. El santo cerdo, Job, y su hermano Caí....aha, caí, caigo y caeré... y quien no se caiga que levante sus rodillas, malditos bandidos de pecados en silencio....
.. Sigo en la rebeldía mientras los agujeros de los bolsillos aguanten el tirón, que de libros va servida y de sepia rehogada, refrita y empachada.... Sólo comí carne magra, muy magra, muy tierna...muy poco pasada, nada hecha. Que las escuelas abren de noche, mientras los farolillos alumbran a sombras vagabundas, pécoras y nauseabundas....
Y el terrible asunto es que en esta telaraña de Barcelona, me apetecía comer sobre un parquet ignifugo......remember, remake y encuadre.
Flash.
La fidelidad como las canalladas no precisan de bisturí, sólo una cuchara y sírvase bien frrrrría.
La sopa, claro. (No pienses, en la traición; ésta es una dama tan aburguesada como aburrida, frígida de los cojones).
El agüacero de su desvirgada vida, se me meó (literal) en todo el plexo. Dicen que la tramuntana no avisa, cubre y micciona.
Abro la puerta.
Ella me esperaba dentro.
Yo la sacudía en las afueras.
Tacón empire state.
Cabellos sueltos.
Feromonas entregados.
Juego de espejos.
Miradas turbias.
Parcos en palabras.
Respiraciones pelvianas.
Dueto en todo el entuerto.
Te conozco. Me conoces.
Bolso y maletas al suelo.
Burbujas del champán idas.
Frenesí en las horas perdidas de las muñecas.
Saliva chiclé.
Dedos descubridores.
Rodillas a tierra.
A cuatro patas la vida.
De pompa, el jabón.
Los móvieles suenan. Las nubes se levantan.
La calor se ceba. El calor se ciega.
El sudor se friega. "La" sudor se niega.
Todo es puro fervor.
Me muestra el puzzle del coxis.
La llave maestra, encaja.
No hace falta aceite.
Hierve la humedad.
Degluta y erupta.
Degluto y blasfemo.
Quebramos, rompemos un maldito espejo.
Cortinas por los suelos.
Me confieso y me insulta.
Le confieso y se emperra.
Me conoces. Te conozco.
Y quééééééé. Shhhhhs.
No existe el agua.
Empieza a llover y las garras de la lechuza empolvan la frente.
La nuca adiestrada, sumisa, se rinde.
Y el juego empieza.
El resto es un punto de sal.
Me encanta no deberme a nada, a nadie.
No quiero enamorarme de la luz del día.
Quiero morirme cuando la noche llega y se deja dormir en la eternidad.
Es tan hermoso contemplar como un volcán rosado nieva donde no llegan las manos, y como asoma la pasión en los lugares más insospechados....
El punto de sangre viciosamente complaciente.
No digas que es vicio.
Es la vida, el hedén de los putanescos."
No era vida, fue un sueño. Un mal sueño.
Y en su despertar más inoportuno, me encontré de bruces a doña vida.
Un placer.
¿Nos conocemos....?
domingo, 16 de junio de 2013
lunes, 10 de junio de 2013
En el insomnio
"El hombre se acuesta temprano. No puede conciliar el sueño. Da vuelta, como es lógico, en la cama. Se enreda entre las sábanas. Enciente un cigarro. Lee un poco. Vuelve a apagar la luz, pero no puede dormirse. Despierta al amigo de al lado y le confia que no se puede dormir. Le pide consejo. El amigo le aconseja que haga un pequeño paseo a fin de cansarse un poco. Que enseguida tome una taza de tilo y que apague la luz. Hace todo pero no logra dormir. Se vuelve a levantar. Esta vez acude al médico. Como siempre sucede el médico habla mucho pero el hombre no se duerme. A las seis de la mañana carga un revólver y se levanta la tapa de los sesos. El hombre está muerto pero no ha podido quedarse dormido. El insomnio es una cosa muy persistente".
Virgilio Piñera (Cuba, 1912-1979)
Cuentos breves y extraordinarios
Jorge Luis Borges & Adolfo Bioy Casares
La cena es a las seis. Yo soy el camarero.
![]() |
Jan Saudek |
Esta soledad
para Juan (regalo)
c. 1980
esta soledad es hija de una altura equivocada
yo tengo el vicio del cielo
soy el único propietario
del aire huesudo y de los pájaros fáciles
los huesos azules del cielo
forman un espacio largo y delgado
y se quiebran en tormenta
y bajan en agua
para acabar en lápida sin nombre
el rojo de mis manos es un misterio
porque brota de ríos blancos que se inclinan como lápidas
a través de la tela metálica
cabizbaja la mala hierba roba el principio del otoño
en otoño los ladrones de cielo
llevan silencio en el pico y tumba en las alas
me agarro a la tela metálica
y no tengo dinero
las mujeres redondas siempre tienen dinero
pero cuando miran hacia lo alto para celebrar una cama nueva
alguien impide el cielo con una navaja de aire
c. 1980
esta soledad es hija de una altura equivocada
yo tengo el vicio del cielo
soy el único propietario
del aire huesudo y de los pájaros fáciles
los huesos azules del cielo
forman un espacio largo y delgado
y se quiebran en tormenta
y bajan en agua
para acabar en lápida sin nombre
el rojo de mis manos es un misterio
porque brota de ríos blancos que se inclinan como lápidas
a través de la tela metálica
cabizbaja la mala hierba roba el principio del otoño
en otoño los ladrones de cielo
llevan silencio en el pico y tumba en las alas
me agarro a la tela metálica
y no tengo dinero
las mujeres redondas siempre tienen dinero
pero cuando miran hacia lo alto para celebrar una cama nueva
alguien impide el cielo con una navaja de aire
me agarro a la tela metálica
y no tengo mujer redonda
yo tengo el vicio del cielo porque tengo miedo
Porque soy cobarde
mujer entera no puedo darte nada plancha mi tormenta
y no tengo mujer redonda
yo tengo el vicio del cielo porque tengo miedo
Porque soy cobarde
mujer entera no puedo darte nada plancha mi tormenta
LA CENA ES A LAS 6.
YO SOY EL CAMARERO.
Pedro Casariego
Suscribirse a:
Entradas (Atom)